El aceite de copaiba es una sustancia oleosa que se obtiene del árbol Copaifera officinalis. Crece en la cuenca del Amazonas y se encuentra en Brasil, Bolivia, Colombia, Perú y Venezuela. Concretamente, nuestro aceite lo importamos de Brasil. Se extrae del centro de su tronco haciendo una pequeña incisión. Es un líquido bastante viscoso cuyo color oscila desde el amarillo pálido hasta el ámbar, tiene un aroma a madera muy rico y su sabor es amargo.
El aceite de copaiba tiene propiedades antiinflamatorias, antibacterianas, analgésicas e hidratantes. Se utiliza para tratar una variedad de afecciones, como:
- Heridas: Favorece la cicatrización de heridas y úlceras
- Trastornos cutáneos: Ayuda a tratar la dermatitis, el acné, el pie de atleta, las picaduras de insectos y las erupciones cutáneas
- Dolor articular o muscular: Reduce la inflamación y alivia el dolor
- Afecciones respiratorias: Ayuda a tratar la tos, la bronquitis y la tuberculosis pulmonar
- Infecciones: Ayuda a combatir infecciones que pueden ser transmitidas por vía sexual, principalmente el herpes genital y la sífilis
- Hongos en uñas y pies: Deshace los hongos y bacterias que puedan esconderse en nuestras uñas y pies
- Psoriasis: Actúa directamente sobre el sistema nervioso
- Infecciones gastrointestinales: Se utiliza para tratar afecciones gastrointestinales como úlceras estomacales
El aceite de copaiba se puede aplicar de manera tópica o por la vía oral. Se puede consumir de 3 a 5 gotas en un vaso de agua tibia o añadirlas a una infusión. Es importante consultar a un médico antes de incorporarlo a rutina.